La formación, la experiencia y la especialización condicionan el sueldo
El informe ‘Impacto de la formación en las retribuciones 2012’ presentado por ICSA Grupo muestra que el mercado cada vez valora más la formación profesional y de postgrado.
La VI edición del estudio ‘Impacto de la formación en las retribuciones’ lo ha realizado ICSA Grupo, consultora de Recursos Humanos en colaboración con La Salle Universities.
El informe muestra que las personas con titulación universitaria (cerca de un 27% en España) aumentan la brecha salarial respecto a los no titulados, y a su vez, que la especialización se ha convertido en un factor determinante para fijar la retribución.
También condicionan el sueldo la formación y la experiencia. El informe muestra el impacto que tiene la formación en el salario desde los primeros años de vida profesional y como va influyendo a lo largo de la vida laboral. Al comparar los salarios de los más jóvenes, se observa un 57% de diferencia entre los que tienen un postgrado y quienes tienen formación más básica. Esa diferencia se incrementa notablemente a partir de los 50 años, llegando a ser 2,8 veces superior (29.269 € frente a 83.467 €).
Para Ernesto Poveda, presidente de ICSA Grupo y autor del informe, “la formación debería ser contemplada como una estrategia de mejora y adaptación continua al entorno y no como una acumulación de títulos al inicio de nuestra carrera profesional".
Los datos revelan que la especialización, tanto en el grado medio como en el superior ‐formación profesional y de postgrado‐ aumentan su consideración desde el punto de vista salarial, creciendo casi un 15 y un 3%, respectivamente.
En este sentido Albert Cubeles, director de másters y postgrados de La Salle BES insiste en que “la competitividad de las empresas recae principalmente en el nivel de especialización de sus empleados por lo que los profesionales deben actualizar constantemente sus conocimientos y significarse como especialistas en su trabajo".
Al analizar el impacto de la formación en la vida laboral, se observa también que los directivos con formación universitaria ocupan la mayor parte de los puestos. Incluso a igualdad de categoría profesional, la retribución es superior en función de la titulación: en el caso concreto de los directivos españoles, los no titulados cobran de media un 17 % menos que sus homólogos universitarios y un 24% menos que los que además ostentan un post-grado.