¿Qué responder en una entrevista de trabajo?

29/03/2023 Sofía Riesco

Preparar una entrevista de trabajo es esencial para llegar con más confianza y exponer con detalle todo lo que queremos decir sobre nosotros mismos y conocer a la empresa que nos entrevista. Hacer una investigación sobre ella y sobre nosotros mismos, conociendo nuestros puntos fuertes y débiles, nuestra trayectoria o sus valores empresariales es clave para no quedarse en blanco y saber qué responder ante cada pregunta que te hagan.

A continuación te dejamos algunos consejos para contestar algunas de las preguntas más frecuentes en una entrevista de trabajo:

Índice
1. ¿Cómo responder a la pregunta “háblame de ti"?
2. ¿Qué contestar cuando te preguntan “cómo te describirías"?
3. ¿Qué decir cuando te preguntan tres defectos y tres virtudes?
4. ¿Qué responder a “por qué crees que deberíamos contratarte"?
5. ¿Qué contestar a “qué crees que puedes aportar a la empresa"?
6. ¿Qué responder a “por qué te interesa el puesto de trabajo"?
7. ¿Qué no se debe decir en una entrevista?
8. ¿Qué hacer cuando no sabes qué responder en una entrevista de trabajo?

1. ¿Cómo responder a la pregunta “háblame de ti"?

Saber cómo contestar al “háblame de ti" requiere un trabajo personal previo para saber qué puntos clave de tu trayectoria profesional y de tu personalidad quieres destacar en la entrevista. Por eso es recomendable prepararse con antelación pero sin sonar forzado o guionizado.

Empieza describiendo tu situación actual, y continúa hablando de tu experiencia laboral (sin repetir lo que pone en el currículum, menciona solo lo más relevante) y de tus puntos fuertes (adaptados al puesto en cuestión). Recuerda tener claras y estructuradas las ideas para que en el momento de la entrevista incluyas todo lo que quieres decir sobre ti. También puedes comentar algunos de tus intereses pero sin ser demasiado personal.

2. ¿Qué contestar cuando te preguntan “cómo te describirías"?

Esta pregunta puede ser otra manera de preguntar “háblame de ti" o “¿qué cualidades y defectos destacarías de ti?", por lo que puedes combinar ambas destacando tus habilidades y fortalezas y diciendo cómo favorecerían al puesto de trabajo; o mencionando tus intereses y formación relacionada que has hecho al respecto.

Los entrevistadores buscan honestidad, confianza y autocrítica para saber si eres el candidato ideal para la empresa. Puedes elaborar previamente una lista de adjetivos que te definan y mencionarlos en la entrevista si se adecúan a la oferta, diciendo porqué te caracterizan.

3. ¿Qué decir cuando te preguntan tres defectos y tres virtudes?

Cuando te pregunten por sus virtudes y defectos en una entrevista lo mejor es ser sinceros y utilizar un lenguaje positivo. De nuevo requiere un trabajo de introspección previo para conocernos mejor y saber qué podemos destacar de nosotros/as mismos/as.

Evita recitar un listado de las habilidades que se demandan para el puesto y que supuestamente tienes. Sé sincero/a y habla de tus puntos fuertes y de cómo los has puesto en práctica en empleos anteriores y cómo puedes hacerlo en el puesto al que optas. La empatía, la creatividad o la organización son algunas de las virtudes habituales, pero deberás ser honesto/a y enfocarlo a la oferta de trabajo.

A la hora de mencionar una debilidad, evita que sea una que afecte al puesto de trabajo. Es decir, si por ejemplo la oferta incluye la necesidad de trabajar en equipo, no destaques esto como un punto débil en el que debes mejorar. Lo mejor es conocerse a uno/a mismo/a y conocer nuestros defectos, o más bien, los aspectos en los que nos gustaría mejorar. Por ejemplo, el miedo a hablar en público, la timidez, no saber delegar, la autocrítica o la impaciencia son algunos de los puntos que, de mencionarlos, hay que hacerlos incidiendo en que eres consciente de ello y que estás trabajando en mejorarlos.

4. ¿Qué responder a “por qué crees que deberíamos contratarte"?

Esta es una de las preguntas más frecuentes en una entrevista de trabajo, en la que debes explicar qué es lo que te atrajo de la oferta de empleo y porqué por todo lo que has destacado de ti mismo/a encajarías en la empresa.

“¿Por que deberíamos elegirte a ti y no a otro candidato?" o “¿Por qué quieres trabajar aquí?" son otras de las variantes de esta pregunta, a la que tienes que responder resaltando lo que aportarías al puesto y cómo la empresa se beneficiaría de ello. También puedes hablar de cómo la cultura de la organización encaja con tus valores o tus intereses, o por qué te gustan los servicios o productos que ofrece y cómo sumarías al proyecto.

5. ¿Qué contestar a “qué crees que puedes aportar a la empresa"?

En esta cuestión destaca lo que puedes aportar a la empresa por ejemplo ofreciendo soluciones, aportando ideas o creatividad, solucionando problemas, siendo flexible, trabajando en equipo o liderando proyectos. Es otra manera de hablar de tus cualidades y de tus habilidades, por lo que además de incluir aquellas que buscan en la oferta de trabajo, resalta otras que crees que pueden ser relevantes y que te distinguen entre los demás.

Los conocimientos tecnológicos, la capacidad de resolver problemas, la resiliencia, las habilidades de comunicación o la proactividad son algunas de las competencias más buscadas actualmente por las empresas. Intenta poner ejemplos de cómo las has desarrollado en el pasado y cómo puedes aplicarlas al puesto al que optas, o cómo de alineadas están con los valores de la empresa.

El compromiso, el compañerismo, la empatía, la capacidad de análisis o de síntesis, la iniciativa, la escucha activa, la motivación, el orden o la perseverancia son algunas de las cualidades que puedes aportar a la empresa.

6. ¿Qué responder a “por qué te interesa el puesto de trabajo"?

Una vez que el entrevistador ha leído tu currículum y te ha hecho preguntas sobre tu trayectoria o personalidad, querrá saber porqué estás interesado/a en esa oferta de trabajo en concreto. Es decir, desean conocer si encajarás con la empresa y el puesto en función de tu respuesta y del vínculo que hayas creado durante la entrevista.

Lo mejor una vez más es prepararse informándose sobre la empresa y el puesto en cuestión, cuáles son sus líneas de trabajo o su cultura empresarial. Investiga a la empresa no solo en su web, busca otras opiniones y adapta tu respuesta evitando dar respuestas generales como por ejemplo que buscas nuevas oportunidades. Personaliza la contestación a la organización para la que estás optando.

Lo mejor es responder con sinceridad pero evitando los aspectos económicos. “Me atrajo esta oferta porque…", “Creo que puedo aportar X gracias a mi experiencia en…", “Creo que los valores/productos/servicios de la empresa coinciden con los míos por…/me interesan por…".

7. ¿Qué no se debe decir en una entrevista?

Llegar preparado/a a una entrevista es importante, por lo que evita preguntar a qué se dedica la empresa o en qué consiste el puesto de trabajo, pues se supone que ya deberías haber investigado sobre ello. Igualmente, no respondas “no sé" cuando te pregunten algo que desconoces. Si necesitas un tiempo para reflexionar hazlo, pide unos segundos para pensar y trata de dar la mejor respuesta posible.

Otra de las frases recurrentes a evitar en una entrevista es decir que eres demasiado perfeccionista. Si quieres destacar esto como uno de tus posibles defectos, trata de decir que la atención al detalle hace que tardes más en entregar las tareas, que te cuesta delegar o que prestas mucha atención al detalle. Tampoco queda bien decir que algo que te preguntan está en tu currículum; trata de explayarte un poco más en este aspecto en el que quieren profundizar, ya que lo que buscan es que demuestres tus habilidades de comunicación.

8. ¿Qué hacer cuando no sabes qué responder en una entrevista de trabajo?

Si a pesar de toda la preparación hay algún momento en el que te quedas en blanco o no sabes qué decir, pide un momento para pensar o reconoce que no tienes los conocimientos para contestar pero que te gustaría aprender sobre ello. Si te pones nervioso/a, respira y trata de enfocarte en lo que te han preguntado. Mantén la calma y pide que te reformulen la pregunta para reorganizar tus ideas.

Si finalmente no eres capaz de dar una contestación, puedes sugerir dejar la pregunta para más adelante, o bien pedir algún ejemplo de cómo hacen lo que te están preguntando en la empresa. Es recomendable no mentir en la contestación, es decir, aunque no sepas qué contestar no te inventes la respuesta si lo que vas a decir no es cierto.